Tras muchos estudios realizados se comprobó que existe cierta relación entre las sensaciones y sentimientos que sentimos en base a las tonalidades de los colores. En otras palabras, el color puede influirnos en nuestros estado de ánimo siendo capaz de animarnos o apagarnos. Dependiendo del color nos dará una energía u otra, por ello deberíamos elegir el más correcto para nuestro hogar, especialmente para amueblar nuestro salón que suele ser el lugar donde normalmente pasamos más tiempo.
Es el color más puro de todos, el más pacífico e inocente. Una de las características que más define este color es la capacidad de aumentar la iluminación, dando amplitud y más brillo a la habitación. Visualmente aporta claridad y limpieza, lo que se traduce en un estado de tranquilidad y armonía.
Es la ausencia de color, se le relaciona con la seriedad y formalidad por su elegancia y estilo, pero si se usa en abundancia puede agobiarte ya que absorbe la luz. Se recomienda usar este color con contrastes de colores vivos, de esta forma conseguiremos mantener la elegancia sin que nos apague la habitación.
Es un color acogedor y natural, se relaciona con la seguridad y la perfección, genial para espacios familiares o salones ya que transmite una gran comodidad y calidez. Es un color muy neutro que combina muy bien con muchos otros tonos y colores.
Es el color de todas las pasiones, tanto positivas como negativas. Es un color que da mucha vida e irradia calor y fuerza. Es un color especialmente propio de las personalidades extrovertidas. Este color puede alterar nuestro sistema nervioso, por lo que es recomendable usarlo en pequeñas paredes o accesorios y no usarlo en zonas donde queramos fomentar el descanso.
Es un color incandescente, ardiente y brillante. Estimula la creatividad y el movimiento. Disminuye la fatiga y aumenta el optimismo. Se relaciona con la comunicación, dando optimismo y motivación. Es un color que incita a ser sociable y que también abre el apetito.
Este color invita a la simpatía y alegría. Se vincula con la actividad mental pues es un gran energizante positivo. Una de sus principales ventajas es que aporta gran luminosidad a espacios cerrados o con poca luz.
Es uno de los colores que más suele gustar a la gente. Este color suele ser muy frío pero transmite gran paz y confianza, por ello es un color que invita al descanso y a la relajación.
Es el color de la naturaleza y representa la vida y el crecimiento. Transmite serenidad y esperanza. Suele ser utilizado para calmar las tonalidades excesivamente cálidas.
Recuerda que si estás dudoso a la hora de amueblar tu salón, desde
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